martes, 27 de noviembre de 2012

Manifiesto


En un cruce de miradas
perdí la dirección de mis palabras
y se hizo silencio en mi voz.
Ya sentí el dolor de las puñaladas en el corazón
y ahora he de aprender a curarme las heridas de la piel·
Dame la chispa que me haga arder,
y renacer de nuevo en mis cenizas.
Volar otra vez.
Sonreír,
rompiendo las reglas de pingüinos con chaqueta.
Buscar la música
entre el ruido de pachanga y cubata.
Encontrar de nuevo
a la gente sin miedo a alzar el vuelo
sin mirar la caída.
La sociedad
de pies a cabeza podrida
piensan en seguir la carretera,
yo prefiero caminar campo a través.
Y da igual
si he de echar marcha atrás después.
Seguiré a las nubes
y el viento hará de brújula.
La Luna no ilumina mis pasos,
lo hace una guitarra
pintando en las baoldosas
cada palabra salida del corazón.
Y que se pudran las rosas,
yo regalo margaritas
al que se atreva a darle una patada a la razón.

XI

No me di cuenta de que el aire faltaba a mi pulmones
hasta que sus labios me rozaron.
Ahora tengo miedo a pasear
si no es de su mano.
El tiempo pasó desesperado entre nuestros dedos
haciendo cortas las distancias y más grandes los anhelos.
Perderse entres sus brazos el mejor de los deseos.
El límite llegaba hasta donde llegaban nuestros sueños.
El invierno no acababa
y siempre había lluvia para nosotros.
Daba igual si el Sol brillaba o reinaban las estrellas,
sus brazos eran siempre el mejor abrigo.
'No te marches ahora, quédate conmigo'
y volvían a pasar las horas
como en el vaho de un suspiro.
Tranquilo, siempre entre nubes volando,
colgando de un hilo que sostenía nuestros corazones
suspendidos en el aire.
'Dame un suspiro, no te marches'
pero al hora llegaba
y el destino terminaba con el momento eterno.
Suspendida entre sus brazos hube de marcharme,
con la promesa de volver a volar entre los sueños,
a vivir de nuevo en ningún lugar.

Miedo

Miedo.
El miedo es el puñal que se me clava por la espalda, justo en el centro atravesando mis costillas, perforando mi espina dorsal y la boca da mi estómago. De nuevo está aquí, amenazando con no dejarme escapar de sus garras, diciéndome una y otra vez que nada podrá salir como yo esperaba.
Es ese monstruo bajo la cama, que a media noche te coge y te traga. Que acosa cada rincón de tu casa con sus sombras y te acobarda cual depredador infame, esperando por su presa, babeante y deseoso. Y cuesta de combatir. Cuesta decirle que no. Cerrarle las puertas en la cara y despedirlo con un adiós. Echarlo a la calle a patadas, gritarle al viento que ya no sientes nada y que no te importa cada desgarre y puñalada, que ya te curaste con saliva las heridas del corazón y que no te importa que lo vuelvan a desgarrar, porque el miedo no te agobia, no te tiene atrapada.
Pero sabes que está en un rincón, agazapado esperando por volver y subyugarte. Que adora tenerte entre sus brazos y jugar contigo cual marioneta sin vida ni sentimientos, haciéndote nuevas heridas cada vez más profundas y difíciles de curar.
Entonces te aferras, te aferras a algo, a alguien. Para mi fue alguien. Es alguien. Y aunque es mucho más difícil y doloroso, sé que está ahí, a mi lado, y confío en él. El miedo sigue estando a mi alrededor, pero sé que cuando estoy a su lado, todo se vuelve más claro y las sombras se disipan, dejándome ver el espectáculo de luces reflejadas en sus ojos, la suavidad de la textura de sus labios, y la exquisitez del sabor de su boca. Te coges a él con fuerza, y esperas no separarte nunca, porque sabes que tus heridas se curan despacio, y necesitan de su cariño. Un día tras otro, el miedo queda alejado, dejando ya tan solo el recuerdo de algo pasado, doloroso, pero del que aprendes. Aprendes que de todo se escapa, si tienes un apoyo, y algo junto a ti.

sábado, 27 de octubre de 2012

La melodía de los recuerdos.

Hoy dejé que la música sonara sola, y salió aquella canción. Esa que sacaba la sonrisa a mis labios, recordándote. Volvieron de nuevo los buenos recuerdos a mi mente, convirtiéndose en amargos. La sonrisa se convirtió en una lágrima que resbaló por mi mejilla hasta el infinito abismo de mi soledad. No recuerdo si escuché el final, o directamente cambié la canción medio inconsciente. Pero tus recuerdos se esfumaron igual que el viento arrastra a las nubes tormentosas; lentamente, dejando siempre el rastro de la lluvia por allá donde pasan. Y allí estaban tus heridas de nuevo, volviéndose a abrir poco a poco. Pero no dejé que se abriera la carne bajo el peso de tus falsas promesas. De nuevo, esa coraza de hierro se arremolinó a mi alrededor, protegiéndome de el dolor de tus besos, de las agujas de tus palabras.

jueves, 25 de octubre de 2012

Alma de resaca.

Soy la mota de polvo que brilla a luz de un nuevo amanecer tras la ventana.
Soy ese silencio en la sala de espera que perfora tus oídos.
Soy la gota que se cuela entre tu ropa hasta rozar tu piel un día de lluvia.
Soy el viento que silba en la calle una noche de invierno.
Soy esa persona que te sonríe al pasar.
Soy ese charco que moja tus pies después de una tormenta.
Soy la hoja que cae del árbol en otoño.
Soy el pájaro que cruza volando frente a tu ventana.
Soy la música que te acompaña cuando estás triste, y cuando estás contento.
Soy esa sombra en la oscuridad de tu habitación, que te arropa antes de dormir. 
Soy el olor a lluvia.
Soy el olor a tierra.
Soy el amanecer nublado y el soleado. 
Soy el humo de una vela al apagarse, y el de un cigarro encendido.
Soy los ojos que te miran con angustia, como dos pozos negros.
Soy tu tristeza, tu alegría y tu indiferencia.
Soy el ritmo de tu corazón acompasado al de tus pasos al caminar.
Y es que no te das cuenta de la sonrisa triste que aparece en tus labios al escuchar el principio de esa canción en el reproductor de tu móvil, que rápidamente cambias.
No te das cuenta de lo bonitos que se ven tus ojos cuando un rayo de sol se posa en tu cara, antes de que te pongas la capucha para espantarlo.
No te das cuenta, de esa manía tuya de jugar con el hilo de tu camiseta, o con las mangas de tu chaqueta, cuando quieres distraerte. No te das cuenta de las bolsas de tus ojos o de tu andar cansado. Que tu alegría se ha agotado de tanto usarla, y ahora solo te queda la resaca del día después. Una resaca permanente, pesada y negra que se cierne sobre ti, que te hace ver lo que antes no veías.

viernes, 6 de julio de 2012

No eres nada

A veces, no entendemos por qué otra persona puede hacer lo que hace. No nos cabe en la cabeza esa forma de pensar, y nos viene a la mente un enorme ¿POR QUÉ? Pues bien, no hay un por qué. Simplemente no le importas. No le importa lo que a ti pueda pasarte. No le importa si estás o desapareces. No hay un por qué, porque para ti, tu eres alguien, vives, respiras. Para esa persona NO. Y eso es algo que nos tenemos que acostumbrar a meternos en la cabeza. "Para el resto del mundo eres solo un número más" Ni siquiera eres un nombre. Ni siquiera una persona. Tan solo una cifra más en un número que ellos nunca llegarán comprender, o incluso a saber. Así que, acostúmbrate, a pensar, que no eres nadie.

jueves, 14 de junio de 2012

Somos tan efímeros como un sueños

Despertamos una mañana, y ya tan solo recordamos a penas vestigios de lo que vivimos en la noche. Muchas veces, solo nos queda la sensación de realidad de aquel mundo que hemos dejado a parte. Ni siquiera nos damos cuenta de que, al despertar, estamos matando una parte de nuestra existencia. El minutero del reloj es un verdugo sin piedad que no perdona, y nosotros ni siquiera alcanzamos a ver lo que hay detrás de nuestros ojos, cuando, decidido el momento de el final de cuento, no hay príncipe que nos vuelva a despertar con un beso.

lunes, 11 de junio de 2012

El rebaño desconcertado dice:

Creo que hoy en día hay que desconfiar de todo. Los medios están controlados y manipulados por las personas que están en el mando, el pueblo es silenciado con distracciones, y los pocos que se atreven a hablar son puestos de terroristas y malhechores. Creemos que somos libres mientras en realidad nos están manipulando, odiamos a quién ellos dicen que odiemos y nos gusta lo que ellos nos dicen que nos tiene que gustar. Pero nosotros seguimos pensando que somos libres. Nos hacen mirar para otro lado, como ovejas de un rebaño de los que ellos son perro y pastor, obteniendo de nosotros lo que necesitan mientras nos mantienen entretenidos y no nos enteramos. A pesar de que nos hacen ver que miran por nosotros, no es cierto, solo miran por su interés, haciendo el teatro de que nosotros no sabríamos lo que está bien para un país. Todos somos personas al fin y al cabo, y creo que eso es algo que a nosotros no nos tienen en cuenta. ¿Qué hace a una persona mejor que otra? ¿Unos estudios? ¿El dinero? ¿Sus amistades? Incluso creemos que somos libres para elegir a alguien que nos gobierne y nos lidere, pero eso es tan falso como todo lo anterior.

miércoles, 6 de junio de 2012

Fuck World

A veces me gusta encerrarme en mi mundo interior, ese mundo paralelo que yo creo en mi cabeza y al que solo yo tengo acceso, y nadie más. ¿Y qué más da si todo lo que hay a mi alrededor se va a la mierda? Ya se puede podrir el mundo que a mi no me importa. Que yo me quedo en mi imaginación, en esa realidad virtual de mi cabeza donde yo manejo lo que pasa y cuando pasa, donde no importa como de mal vayan las cosas, a mi no me afecta nada. Dejadme sola, que yo me quedo en mi coraza. Que yo me inventaré que alguien me abraza, que a alguien le importo. ¡A la mierda el mundo y sus reglas! ¡A la mierda la sociedad y sus prejuicios! Mañana me fumaré un porro delante de un guardia civil y bailaré desnuda delante de una iglesia. Que a mi me la suda lo que puedan decir, que no me importa que me señale con el dedo. No soy un mono de feria, ni soy una loca sin cerebro. Porque yo al menos pienso por mi misma, en hacer lo que quiero, y cuando quiero. A mi nadie me dice lo que me tiene que gustar. A mi nadie me explica cómo y por qué tengo que vivir, que yo vivo por mi y cómo a mi me apetece.

miércoles, 9 de mayo de 2012

Capítulo I


Como cada día, me levanté de la cama después de que el despertador sonara incesante, con aquella canción de los Red Hot Chili Peppers - Californication. Ni siquiera dejé que el cantante empezara a cantar, antes de que la suave canción variara de tono ya había parado la alarma. ¿Para qué escuchar más? Ya sabía lo que venía detrás, y en ese momento se me antojaba la canción más horrenda del mundo, pues me había sacado de mi apacible letargo en mi cama caliente. Aun así, me quedé unos minutos mirando el techo, como si no conociera de quién era, o tal vez no conocer quién era yo. La verdad es que no lo sé exactamente, pero creo que pensé que ese día iba a ser igual de monótono que el anterior, y tampoco me equivocaba demasiado. Me levanté de la cama con pasmosa lentitud, y eso que sabía que iba con el tiempo pegado al culo. Pero ¿qué más daba? Un minuto más que un minuto menos. Mis pies todavía tenían que acostumbrarse al frío suelo bajo mi piel. Miré a mi alrededor, y todo me parecía tan ajeno. ¿Era yo la misma persona que ayer, o había cambiado durante el sueño? Eso nadie podría saberlo. Podemos ser personas diferentes en cada momento del tiempo. Y en aquel momento, yo no sabía quién era. Aun así, sabía mi rutina, por lo que no tarde en levantarme e ir directa hacia la ducha. Allí, el agua empezó a aclararme un poco las ideas, o tal vez a deshacerme de aquellas primeras preguntas con las que me había despertado. Ahora pudo empezar a tener conciencia de mi misma, si es que alguna vez la tuve, para empezar a recordar las cosas que en ese día tenía que hacer. Mientras iba enumerando mentalmente mi día al completo, que al parecer ya estaba planificado, salí de la ducha y empecé a secarme el pelo con la toalla. "No tiene que olvidárseme darle a la maestra de Filosofía aquella disertación tardía para que no me baje la nota", me decía a mi misma, con un sinnúmero más de anotaciones mentales con preludio "No ha de olvidárseme..." Tras frotarme bien con la toalla mi pelo negro, largo hasta la cintura, fui directa a la habitación, todavía con una toalla solamente enrollada alrededor del cuerpo, cosa que hizo que mi piel se erizara por el contraste del frío. Casi sin mirar, saqué del armario un par de vaqueros y una camiseta azul, de manga corta, algo normal. Me puse la ropa sin siquiera advertirlo, cada movimiento era mecánico, ni miraba ni prestaba atención a lo que hacía, era solo un movimiento más. La verdad es que aquella mañana fue bastante normal. Tras secarme el pelo ni siquiera pude desayunar, salí corriendo con la mochila en la espalda para juntarme con mis dos amigas, Isa y Nerea, las cuales me esperaban cada mañana para ir juntas al instituto, puesto que vivíamos la una muy cerca de la otra. Isa, que era algo más alta que yo, con el pelo negro largo y muy rizado, tenía una piel blanquecina la cual odiarían algunos góticos. Era de caderas anchas, aunque vientre plano, y caminaba de forma que te hacía pensar que tenía los pies planos. Nerea, era unos centímetros más altos que Isa. Flaca como un palillo y de piel amarillenta, contrastaba su energía con aquel tono enfermizo de su cara. Y su pelo, una melena aleonada castaña, era completamente rebelde, y a pesar de los esfuerzos de ella por domarla, siempre terminaba quedándose como si llevara el pelo cardado. Ambas llevaban gafas. De hecho, pocas en mi grupo no las llevábamos. Creo que, tan solo, Marina y yo, y eso que somos un grupo de ocho, ¿o quizás más? Tampoco es que se pudiera determinar exactamente. Mientras caminábamos íbamos hablando de algo, lo que no recuerdo es exactamente de qué, pues seguramente sería trivialidades de las clases o algún chico que se cruzaba por nuestras cabezas. Los temas de conversación no solían variar demasiado en ese aspecto, aunque la verdad ¿qué más se puede esperar de tres chicas adolescentes?
Llegamos al instituto cuando el timbre acababa de sonar y, sin despedirnos siquiera, cada una se fue a sus respectivas clases. Raras veces nos tocaba juntas, pues yo iba a la rama de ciencias y ellas a las de letras. ¿Por qué había cogido ciencias? Ni yo misma lo sabía, nunca me habían gustado la verdad, pero mi familia siempre me había comparado con mi prima. Ella era la chica genial, que sacaba notas estupendas y que algún día sería una médico estupenda. Yo debía seguir sus pasos.

lunes, 7 de mayo de 2012

Yo necesito amor



Me abandonó la esperanza del encontrar el amor. No, por favor, no pienses que ya he tirado la toalla, es ella la que me ha echado a mi al suelo, me ha pisoteado y escupido para luego marcharse y dejarme a mi, solo y sucio contra estas baldosas que huelen a moho. Y aquí, solo, me quedé divagando sobre lo que es el amor, y los tipos de amor. Porque, señores, no hay solo un amor, hay muchos, y somos tan ambiciosos que los queremos todos. Queremos el amor de nuestros amigos, el amor de nuestros padres, y el amor de esa persona a la que no nos podemos sacar de la cabeza, esa a la que no echaríamos un polvo, sino que le haríamos el amor durante días enteros... Bah, ¿qué coño estoy diciendo? Malditas pajas mentales. Me dejaste solo, tirado, sucio, como un puto perro, ¿y yo sigo queriendo hacerte el amor? ¿Quién necesita amor cuando tiene drogas? ¿Quién necesita amor cuando tiene alcohol, sexo? ¿Quién necesita amor cuando tiene Rock'n'Roll?
Yo, aquí, me presento con las manos en alto. Yo necesito amor.

jueves, 3 de mayo de 2012

"El club de la lucha"

Ayer vi esta película, "El club de la lucha", que sinceramente recomiendo a todo aquel que quiera una buena dosis de pelea, y un psicoanálisis de esta sociedad. Me quedé pasmada con muchos de los monólogos de la película, sobretodo los de Brat Pitt como Tyler Durden, y todo es inesperado en esta película, nunca sabes qué es lo que va a pasar a continuación. La verdad es que, realmente, la recomiendo.
Os voy a dejar algunos de los monólogos que más me impresionaron para que juzguéis por vosotros mismos.

"La publicidad nos hace desear coches y ropas, tenemos empleos que odiamos para comprar mierda que no necesitamos. Somos los hijos malditos de la historia, desarraigados y sin objetivos. No hemos sufrido una gran guerra, ni una depresión. Nuestra guerra es la guerra espiritual, nuestra gran depresión es nuestra vida. Crecimos con la televisión que nos hizo creer que algún día seriamos millonarios, dioses del cine o estrellas del rock, pero no lo seremos y poco a poco nos hemos dado cuenta y estamos, muy, muy cabreados. No somos nuestro trabajo. No somos nuestra cuenta corriente. No somos el coche que tenemos. No somos el contenido de nuestra cartera. No somos nuestros pantalones... Somos la mierda cantante y danzante del mundo."




 Y frases sueltas muy buenas:


  • Únicamente cuando se pierde todo somos libres para actuar.
  • Si el tiempo vivido es largo, el índice de supervivencia para todos se reduce a cero.
  • Lo que posees acabará poseyéndote.
  • Cuando la gente cree que te estás muriendo es cuando en verdad te escuchan, en lugar de estar esperando su turno para hablar.
  • Cuando se padece insomnio nada parece real. Parece una copia de otra copia de otra copia.
  • Si te despertaras a otra hora en otro lugar....¿te despertarías siendo otra persona?
  • Tienes que saber, no temer, saber que algún día vas a morir, y hasta que no entiendas eso, eres inútil.
  • No eres un bonito y único copo de nieve, eres la misma materia orgánica en descomposición que todo lo demás, todos somos parte del mismo montón de estiercol...
  • Sentía ganas de meterle una bala entre los ojos a cualquiera que se negara a follar para salvar su especie. Quería abrir las válvulas de descarga rápida de todos los petroleros y llenar de crudo todas esas bonitas playas que yo jamás conocería. Quería respirar humo.
  • La autoperfección es simple masturbación.

martes, 1 de mayo de 2012

Presentación


Desperté por la mañana y, extrañamente, ya no sabía donde estaba. No es que no reconociera todo lo que había a mi alrededor, era mi habitación, la de siempre, en la que había dormido estos últimos dieciséis años. Pero todo lo que había allí me era ajeno, como si entrara a la habitación de una persona desconocida. Las caras de las fotos en la pared no me decían nada, eran como fantasmas de un tiempo pasado, que ahora ya no existían o que se volvían opacas y ya no simpatizaban conmigo. Como queriendo que todo aquello fuera una extraña pesadilla pasajera volví a cerrar los ojos con fuerza. Pero al abrirlos, allí estaban de nuevo, esas caras y esas pertenencias de alguien que había vivido toda su vida al dictamen de unos padres opresivos, perfecionistas y materialistas. Tras un suspiro derrotado, volví la mirada al despertador de la mesilla, a penas quedaban cinco minutos para que empezara a sonar, y entonces ya todo estaría perdido de nuevo. Empezaba un nuevo día, una nueva muerte.




[Bueno, después de darle unas cuantas vueltas, y de que muchas cosas me rondaran por la cabeza, he decidido empezar una nueva historia en este blog. Sé que ya muchos ni leéis lo que pongo, pero para aquel que lo haga, intentaré subir un capítulo cada miércoles. Esto ha sido tan solo una pequeña presentación, para que veáis más o menos como se va a escribir todo.]

lunes, 30 de abril de 2012

Luna de miel

Que se quede mudo el despertador y así poder quedarme en la cama a tu lado todo el día, sin separarme de tu piel. Que tus brazos me arropen cada noche, y tus ojos sean ese mar en el que me pierda cada mañana al despertar. Y es que te has convertido en mi pensamiento favorito, al que acudo cada vez que las sombras me vienen a perseguir, porque tu luz hace que me sienta a salvo.

sábado, 28 de abril de 2012

Mal actor

Ponte frente a un público vacío y vomita cada palabras sin sentimiento sobre ellos. Conseguirá aplausos, pero en el fondo ninguno llegara a sentir nada, sus corazones seguirán fríos como al principio de entrar en la sala.

Después de comer perdices

Ya no tengo corazón, lo arrojé a los cocodrilos para que dejara de sangrar. Herido y supurante de nada me servía ja. Aprendí a base de golpes que las penas no se van, desgarran y queman hasta dejarte entumecida y sin ganas de luchar. Imploras por un fin que sabes que todavía no llegará, primero viene la tortura y después el golpe final.

viernes, 27 de abril de 2012

I

No estoy aquí para alegrarte el día,
tu no alegraste mis mañanas con tus malas ganas.
No esperes una sonrisa
que te saque del apuro
espera sentado
mientras ves como se aleja mi culo.
Me importa una mierda
si estás triste por tus problemas,
paga a una psiquiatra
para que soporte todas tus penas.
Que no soy tu perchero
ni tu puta personal,
que mi vida tiene un tiempo
y lo pienso aprovechas.
Ahora mira mi espalda mientras me alejo de ti
y te dejo de nuevo solo.
Te advertí que no debías confiar en mi
y ahora me culpas de todo.
Soy experta en irme sin un Adiós,
en defraudar a todo el que importé.
No hace falta que nombre a Dios,
yo soy hija del diablo, entérate.
Quédate con el corazón roto y desgarrado
yo no mentí en mis palabras
tu supusiste demasiado.

martes, 17 de abril de 2012

lunes, 16 de abril de 2012

Miradas de horizonte

Poco a poco pasa el tiempo y yo sigo hacia delante. De vez en cuando echo la vista atrás, y se que lo estoy haciendo mejor que antes. No importa cuantas veces tropiece, sino todas las que me levante. Da igual si rompo con todo y luego empiezo a quejarme. Ahora tomo cada día con una nueva sinfonía, esperando que al acabar la partida pueda tener la banda sonora de mi vida. Ya no compongo rimas, que ahora hago canciones, porque sé que así hago más ruido y toco más los cojones. Y que no me importa si vienes ahora y te marchas después, yo te dejaré una nota al despertar diciéndote que esta ha sido la última vez.

miércoles, 11 de abril de 2012

Confesión #1

Y sí, te confieso que sigo mirando tus fotos cada vez que puedo. Pero es solo para recordarme lo estúpida que fui en regalarte mi corazón.

Teatro de un amor.

Dame alas para volar, para escapar de esta espiral de angustia. Dame restos de cariño perdido entre sábanas de amor podrido. Dame un beso falso, de esos que no te hormiguean en el estómago y que luego te limpias con la manga del jersey. Porque ambos sabemos que lo que sentimos no es de verdad, pero preferimos pensar que tal vez podría serlo. ¿Qué mas da engañarnos a nosotros o al resto? Si tus caricias me hacen olvidar todo lo demás, ¿que importa que sean falsas? Yo seguiré buscando calor entre los rescoldos de las brasas. Tal vez un día llegue el amor verdadero y todo este teatro se acabe, pero mientras seguiremos jugando a que tus palabras son ciertas y mis caricias sinceras.

lunes, 2 de abril de 2012

Punto y a parte.

Da igual cuantas veces mire este cielo, te sigo sintiendo lejos.
Da igual cuantas veces te eche de menos, no vas a volver a mi lado.

Seré solo un recuerdo

Mañana solo quedarán estas letras escritas en ninguna parte, a penas retazos de lo que un día fui, a penas pensamientos que abordaron mi mente durante un instante.
Dime tu, que me conociste, si seguirás recordándome. Ahí es como yo seguiré viva. En cada persona, en cada pensamiento, en cada recuerdo que lleve mi nombre, mi alma permanecerá vigente e impoluta. Pura y en su más absoluta esencia.
Recuérdame con cada gesto y detalle, y estaré siempre viva para ti.

domingo, 1 de abril de 2012

Aquel reflejo en el espejo

Dices que me conoces, pero lo que sabes de mi es a penas un puñado de mentiras y de fachada que la gente puede ver, pero no has visto nada a través de mi mirada. Ni siquiera se yo misma quién soy cuando me miro al espejo. Si soy la que fui ayer, o dejé de serlo cuando me acosté en la cama y dejé que viniera un nuevo día. Ya no sé, si soy la misma que fui un día de enero, o si cambié ayer, o fue tal vez después de dejarte marchar. No lo recuerdo. Tal vez fue poco a poco, caí y me levanté tantas veces, y tantas que me quedan, que mis rodillas se magullan solo de pensarlo. Aún así sigo fuerte, sigo con mi barrera, mi escudo, que la gente no vea más allá de mi apariencia. Recuerda que yo nunca miento, pero no siempre digo la verdad.

A veces

A veces me pregunto qué es lo que pasa por tu cabeza. Si sigo teniendo mi hueco en tu corazón o ya lo has cubierto con cemento o le has cedido mi apartamento alquilado a otra persona. A veces leo algo tuyo en alguna parte y me pregunto si lo que dices va referido a lo que ambos pasamos, si esas palabras me las dices a mi, o se las dices a ella, o a ella, o a ella... A veces, casi sin querer, por alguna frase de una canción, por salir a la calle y mirar hacia arriba, a las estrellas, vuelve a venir a mi mente aquellos momento en los que estábamos juntos, y me pregunto de nuevo si estarás pensando en mi.
Y es que, a veces, me encuentro sin saber por qué perdida en una calle por la que los dos pasamos, recordando como me cogiste por un puto instante de la mano y yo me derretí cual cubito.
Tu empezaste por donde lo habías dejado, yo partí de cero. Separamos nuestros caminos, tu escogiste un atajo. Y ahora nos vestimos por la mañana con la sonrisa y dejamos en casa, cerrados bajo llave, aquellos recuerdos de una noche de febrero.

martes, 27 de marzo de 2012

#

Tal vez después de esto ya no sienta lo mismo
quién sabe si mañana seguiré sintiendo.
Cuando no vemos una mota de polvo nos parece un abismo
y cuando vemos nos parece pequeño el mismo infierno.

El suicida

El suicida es un cobarde jodidamente valiente. Cobarde, por abandonarlo todo y no enfrentarse a ello. Valiente, por tener huevos a perderlo todo, incluso la vida.

viernes, 23 de marzo de 2012

El futuro

El futuro es algo demasiado abstracto para poder determinarlo con seguridad, pero aún así, nos empeñamos en rozar con la punta de los dedos siempre esa línea que hay entre el ahora, y el ahora también. A veces lo trasgiversamos de tal forma que lo podemos hacer lejano, o al mismo tiempo dejarlo tan cerca que se confunde con el presente. Y es que, ¿qué es al fin y al cabo el futuro? Para algunos, el futuro es una paleta llena de posibilidades, de colores, de vida. Para otros el futuro es simplemente una tortura, un mundo pintado de gris, una cárcel de la que no pueden escapar.
Son tantas las posibilidades como personas y animales hay en este mundo, y en todos los que nos quedan por descubrir.
Pero hoy me doy cuenta de que, dentro de nuestra paleta de posibilidades que es el futuro se nos cierran muchos colores. Hay gente que intenta cerranos las puertas, poner trabas a todo aquello que soñamos. El pasado determina nuestro futuro y el presente todavía más, poniendo sobre hombros jóvenes cargas demasiado pesadas, soportando el sudor y la sangre con la que manchamos día a día nuestra hoja en blanco cada vez más llena, para que al final, cuando por fin llegamos a la meta, tengamos que elegir otra opción que no moraba en nuestra cabeza. Tal vez, si eliges la opción incorrecta, la que tú quieres pero ellos te dicen que no, podrás salir a delante, pero nunca gracias a ellos. Siempre "pensando por tu futuro" no has de pensar en lo que te gusta, sino en lo que necesitas, en la opción correcta para vivir. Dime qué necesitas y te diré que es lo que no quieres.

Esto va a cambiar

Hoy, después de tanto tiempo con este blog abandonado en la miseria sin haber entrado si quiera para ver si alguno de vosotros me dejaba un comentario, me decido a empezar de cero.
Lo primero que quiero es pediros perdón porque sé que os he tenido abandonados a todos, lo segundo, deciros que todo esto no va a ser como antes.
Tal vez, de vez en cuando, cuelgue alguna poesía, pero prácticamente el blog se compondrá de pensamientos. Cosas que pondré por escrito y que tal vez para nadie tengan un sentido o un valor característico, pero sobre las que, algunas veces me gusta reflexionar.
Dicho esto, creo que ya es hora de despedirme y dejarles disfrutar de la función de mi mente. Aquí os abriré las puertas de mi ser, no solo de mi corazón, sino de todos mis pensamientos, vivencias, y más oscuros deseos.